sábado, 9 de mayo de 2015

El Jardín Botánico, monumento en deterioro

Este es el estado el Jardín Botánico


Erika Nigrinis 
Redacción periodística I 

En el barrio La Victoria se encuentra uno de los pulmones más importantes de la ciudad, es el Jardín Botánico que cuenta con aproximadamente, 5 hectáreas y media de extensión. Por su descuido y por la presencia continua de delincuentes, los habitantes del sector consideran que se ha convertido en un espacio sagrado para realizar actividades ilícitas.

El día 15 de enero de 2015, el cuerpo de Sebastián Caro, un joven de 18 años, fue hallado en un canal de aguas, a tres metros de distancia de la cancha de futbol. Presentaba señales de asfixia, según lo corroboró Medicina Legal.

Édgar Púa, integrante de la Junta de Acción Comunal del barrio, expresó su preocupación por las condiciones de abandono y deterioro en que se encuentra el Jardín Botánico. Dice que hay negligencia administrativa por parte del Foro Hídrico de Barranquilla, que es la institución encargada de vigilar y proteger los espacios públicos con reservas naturales.  Según él, llevan más de 30 años de estar esperando que los proyectos que la alcaldía promete, se hagan realidad. Aunque aún mantiene la esperanza de que este año los jueces realicen acciones con respecto a esta problemática. 

En el año 2011, el abogado, Antonio Borges, debió utilizar el recurso de una acción popular para conseguir atención oficial para el Jardín Botánico, sin embargo este recurso ha resultado fallido, ya que un juez a cargo negó la petición aunque ordenó inspecciones por parte de otra autoridad medioambiental, el Departamento Administrativo del Medio Ambiente,  (DAMAB). La acción popular fue nuevamente apelada por el Distrito en noviembre del año pasado y, mientras tanto, la Alcaldía hace caso omiso.

Los habitantes se quejan de esta determinación, aducen que la inspección se realiza cada seis meses contando que incluye limpieza. Para ellos no es suficiente, y esperan el castigo penal a  la alcaldía. El servicio que se ofrece no es de calidad, porque el comején invade los troncos de los árboles que oxigenan el aire. El Jardín Botánico es atravesado por senderos internos, algunos de ellos sirven como conexión entre zonas del barrio. Desde hace 21 años, en uno de esos senderos, fue construido un puente peatonal, actualmente bastante deteriorado, al igual que los muros y el enmallado protector en los alrededores del Parque Natural. Las inversiones que se hicieron en el mejoramiento de su infraestructura, recuerdan algunos vecinos, fueron realizadas durante la alcaldía de Bernardo Hoyos, desde entonces no hay inversión oficial y el desmejoramiento es evidente. Se estima que para este año se inviertan 13.500 millones de pesos para comenzar obras de recuperación del entorno y que darán una mejor fluidez y pureza al ojo de agua que dio origen a esta reserva natural, también se anuncia inversión en la mejoría de las instalaciones del parque.

Deyler Cifuentes, un joven aseador que trabaja en los alrededores, expresa su tristeza de ver el estado en que se encuentra. Dice que la mayor preocupación son los niños porque el lugar no es apto para que puedan disfrutar el parque natural, el entorno no es seguro, ni limpio, y tampoco está adecuado. “El Jardín ya no es color de rosas, ahora es prácticamente un infierno”. Aun así, limpia con mucha dedicación sus alrededores para liberar poco a poco el deterioro del lugar.

Wilson Bru, patrullero del CAI Ambiental con cargo de responsabilidad, dice que desde hace 5 años prestan el servicio dentro de la reserva natural, en donde, en ese tiempo se ha presentado un avance con respecto a la seguridad. En diciembre 2014 el equipo de patrulleros fue trasladado al Paseo Bolívar para fortalecer la seguridad en el sector comercial, pero debieron regresar porque los residentes de La Victoria pidieron el servicio debido  a que la tasa de índices en robos aumentó de manera alarmante en ese lapso. Los policías encontraron animales exóticos que no están entrenados para la domesticación y cuando los dueños entran en pánico al no saber cómo criarlos, los abandonan en el jardín y es un blanco de miedos para los que circulan en esa reserva natural.

La cada vez se hace más tensa la situación. Se ha convertido en un juego de parqués en el que las fichas son movidas por los administradores del Foro Hídrico por una parte y los habitantes por otro, mientras que la “cárcel” es el Jardín Botánico en donde las víctimas caen allí gracias a la inseguridad. Aún no hay ganador, aunque se espera que se haga honor a los habitantes de La Victoria y a su Jardín Botánico.


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